Mystery Box
Holaaa🍌🍌🍌
Hoy les vengo con una entrada diferente, no es nada que hayan visto antes... o por lo menos en mi blog.
Resulta que MysteryBoxuy realizó una publicación en su Instagram, abriendo un concurso apto para bloggers y booktubers uruguayos, cuyos dos ganadores recibirán una caja gratis por tres meses.
Las bases para concursar consiste explicar qué es la MysteryBox y exponer los diferentes tipos de cajas.
En mi caso, para participar... ¡HICE UN CUENTO!
Espero que lo disfruten tanto como yo lo hice al escribirlo.
🍌🍌🍌
Mystery Box
El cielo se tiñó de negro, dando
comienzo a una tormenta perfecta. Empezó a llover.
Era la primera vez que Izan, y su
hermano menor Juan se quedaban solos en su casa.
- Papá y mamá fueron a hacer las
compras, no tardarán mucho. - Le había dicho a Juan cuando se despertó de su
siesta con sus enormes ojos marrones aún somnolientos. Había cumplido ocho años
hacía tan solo una semana.
Izan se levantó del sillón y caminó
a la cocina para preparar palomitas de maíz. Pese a sus malas ganas, sus padres
le habían hecho prometer que miraría Stranger
Things con su hermano menor.
-¡No les tengo miedo! – Replicó
Juan cuando Izan le había contado que aparecerían monstruos en la serie.
Ya habían visto un par de películas
de terror con sus padres, y Juan, una vez terminado el filme, iba derechito a
la cama de Izan y le rogaba que lo dejara dormir con él. Por varios días.
Tal vez se asuste tanto de los demogorgons que no querrá ver más
películas de terror.
Cuando volvió al comedor, Juan ya
se había acomodado en el sillón, cubriéndose con una mantita.
-¿Le pusiste sal? – Preguntó
ansioso.
-Como siempre.
Empezaron en el capítulo primero.
Iban ocho minutos sumergidos en los
sucesos que les mostraba el televisor cuando afuera sonó un fuerte trueno que
retumbó en sus oídos.
Estalló la lamparita de luz en la
serie que estaban mirando. Y un momento después, los hermanos también se
quedaron sin luz en la enorme casa.
Ambos retuvieron un grito ahogado.
Se hizo un gran silencio.
Riiing. El timbre.
-Ya vuelvo, voy a buscar la
lintern—
Pero Juan había salido corriendo a
abrir la puerta.
-¡MAMÁaa…- Su grito se volvió un
susurro cuando no vio a nadie del otro lado.
Exasperado, Izan dio largos pasos
hasta el umbral pensando en todas las cosas que le iba a decir a su hermano
menor por haber abierto la puerta sin preguntar quién estaba del otro lado,
cuando se detuvo abruptamente.
Arrugó su entrecejo y miró hacia
los lados. Nada.
Entonces Juan le dio un golpecito
en el brazo y señaló hacia abajo.
Una caja.
-Rápido, vamos a entrarla antes que
nos sigamos mojando.
Juan la tomó cuidadosamente y la
llevó a la mesita de vidrio que se encontraba frente al televisor. Izan prendió
su linterna, de modo que la luz se posara sobre la hermética caja.
-Mystery Box, -Leyó Juan en voz
alta mirando la negra inscripción en la superficie de cartón de la caja.
-Creo que debemos abrirla. -dijo
Izan terminantemente.
-Pero… es un misterio.
-Si, se llaman así. Todos mis
amigos tienen una.
-¿Entonces no es un misterio?
-Bueno, lo es en cuanto nadie sabe
qué artículos contiene dentro hasta que la abres.
-El que arma la caja sí lo sabe.
Izan rodó los ojos.
-Si alguien lo sabe, entonces no es
un misterio… ni una mystery box. -Concluyó Juan triunfante.
Siempre sucedía lo mismo: por más
que Izan intentara explicar algo, su hermanito solo entendía el sentido literal
de las cosas.
Izan lo intentó una vez más.
-A ver, la Mystery Box se llama así
porque es una caja mensual para fans, que cambia de temática y contiene artículos
varios inspirados en películas, series, videojuegos y comics. Existen tres tipos de caja
dependiendo de cuánto estés dispuesto a pagar, y por ello pueden traer más o
menos artículos.
Juan inclinó su cabeza como lo
hacen los perros cuando tratan de entender algo.
Que raro, pensó Izan, tomando la caja de nuevo, examinándola y
sacudiéndola ligeramente para escuchar qué había dentro, yo no pedí ninguna caja.
-¿Qué es eso?
Un folleto que estaba pegado a la
caja cayó al suelo. Juan lo tomó rápidamente y lo extendió frente a sus ojos.
-Parece una dirección. Mysteryboxuy@gmail.com. ¡De allí
vienen las cajas! Les voy a decir que no son misteriosas.
Izan se lo quitó de las manos y observó los precios de las cajas:
"$450: 5 artículos.
$850: 8 artículos, entre ellos uno oficial.
$1200:11 artículos, entre ellos, artículos oficiales y un Funko Pop."
-Vamos Juan, pásame la tijera que
la voy a abrir.
-¡NO!
En ese instante, se oyó otro trueno
y las luces se prendieron.
Sus padres abrieron la puerta de un
tirón, empapados por la lluvia.
Juan e Izan saltaron del sillón y
se pararon delante de la caja para ocultarla.
-¿Qué rompieron ahora?- dijo su
madre -¿Izan, qué sucede?
-¡Nada!- Gritaron en unísono.
Su padre se sacó la campera mojada
y pasó apurado hacia la cocina, rodeando la mesita de vidrio.
Izan giró bruscamente para que su
padre no se diera cuenta que la mystery box se encontraba allí, pero cuando
posó sus ojos sobre ella…
La caja ya no estaba.
Una idea muy original, suerte
ResponderEliminarLa literatura al servicio de Mystery box, deberían colaborar contigo, te lo merecés. Saludos
ResponderEliminarHolaaa, muchas gracias <3 Adoro tu blog
Eliminar